En la tierra reposan los muertos,
esta sembrada de huesos, que infestas semillas ha plantado el hombre.
El clímax del pensamiento ha dado tan horrendos frutos...
Que siglo pasado de donde vengo... ¿Podrá el hombre volver a redimirse?
Pero así y todo la conciencia parece liviana y el humano camina la misma senda.
Que las generaciones futuras enderecen el rumbo,
que llegue el día en que se respire profundo y se contenga el aliento.
Y se cierren los ojos y los pueblos del mundo se miren por dentro.
Y volvamos a ser hermanos los ahora extraños y trabajemos con empeño para el mañana promisorio.
Para que algún día vuelvan los días de nuestros antepasados los días felices de antaño,
en el que el mundo era aun inocente y los hombres soñaban...
Cuando los pájaros callan... Llegan las nocturnas horas y en estas es cuando la creatividad de los hombres sencillos pero de pensamientos intrincados se deshace de las pesadas cadenas de lo cotidiano. Y se aventura a un mundo abstracto e inconsciente que se vuelve real tan solo por un rato. Quien soy yo? Un Marplatense un hombre simple como tantos otros con la necesidad de expresar las cosas que por mi mente pasan a lo largo de los días.